Nada de vértigo ni bloqueo creativo: más bien parece una pausa estratégica, al estilo de artistas como Adele.

El ex One Direction lleva más de un año sin lanzar un nuevo single, pero no por falta de inspiración: todo apunta a que se está tomando su tiempo para cocinar su cuarto disco con calma, posiblemente desde Berlín, su nueva base creativa.Después del bombazo que fue Harry’s House —con tres Grammys, millones de copias vendidas y una gira que agotó 173 fechas—, Harry ha optado por desconectarse un rato, sin novedades en redes y sin prisas. Su último lanzamiento fue Daylight, y desde entonces, silencio total, salvo por rumores de mudanza y avistamientos en el Vaticano y en las calles alemanas.

Mientras tanto, sus fans solo pueden especular y cruzar los dedos por un regreso igual de brillante. Harry sabe lo que hace… y el mundo está atento.