El famoso cantante Robbie Williams se vio obligado a detener momentáneamente su espectáculo en Países Bajos debido a los síntomas prolongados de COVID-19 que experimentaba.

 A pesar de las dificultades, el artista retomó la presentación con humor y determinación.

Durante su actuación en el Festival Pinkpop en Landgraaf, Países Bajos, Robbie Williams se preparaba para lanzar su cuarta canción, "Monsoon", cuando solicitó a su banda que detuviera la introducción. Entre jadeos, el cantante británico expresó: "No, para, para. Estoy jodido. Estoy jodido. Es un covid largo, tengo un covid largo". Con una pizca de humor, agregó: "No es por mi maldita edad, cabrones".

A pesar de la interrupción, Robbie reinició la canción y continuó con el resto de su presentación sin más incidentes. Posteriormente, voló al Reino Unido para encabezar el Festival de la Isla de Wight el domingo por la noche.

La COVID prolongada, también conocida como síndrome post-COVID, se caracteriza por síntomas que persisten más allá del período normal de la enfermedad. Según el NHS, los síntomas comunes incluyen fatiga, dificultad para respirar, pérdida del olfato y dolores musculares.

A pesar de enfrentar dificultades debido al COVID prolongado, Robbie Williams demostró su compromiso con la música y su público al retomar su concierto con valentía. Su determinación es un recordatorio de la resiliencia necesaria en estos tiempos desafiantes.